En Yakutia hay una gran cantidad de colosales y pintorescas rocas, y el viajero decidió escalarlas. Desde lo alto, uno puede disfrutar de unas vistas verdaderamente singulares.
Fischhuber afirma que estos paisajes se parecen más bien "a un mundo de fantasía".
Para llegar a Yakutia, el austriaco tuvo que volar en aviones, navegar por ríos y pasar tres días caminando a pie junto con un guía experimentado.
Pese a lo agotador que fue el viaje, el escalador no lamenta haberlo emprendido, ya que los magníficos paisajes recompensaron todos los esfuerzos.
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