"El Gobierno español y las fuerzas políticas españolas deberían moverse claramente en esa dirección, hacia un trío del liderazgo europeo entre Alemania, Francia y España", afirma López, que fue Secretario de Estado de España para la UE entre 2008 y 2011.
"La Unión Europea necesita un liderazgo que en estos momentos no tiene y España podría ser muy útil para su construcción; sería un movimiento estratégico que iría no solo en favor de Madrid", relata.
A su modo de ver, un mayor liderazgo español en la UE podría ayudar a resolver la brecha abierta entre los países del norte y del sur del club comunitario, evidenciada sobre todo durante los peores momentos de la crisis económica con países como Grecia o Portugal.
"El sur de Europa tiene que tener cada vez más peso en las decisiones de todos los ámbitos", opina López.
Del mismo modo, López expone que las "extensas conexiones políticas, económicas y culturales" de España y Portugal con Latinoamérica pueden servir para mantener una buena relación con los países del entorno y lanzar proyectos de todo tipo, algo que a su modo de ver se hace palpable con los trabajos para sacar adelante los acuerdos comerciales entre la UE y Mercosur.
Todo lo anteriormente expuesto, resume López, indican que España tiene "una posición estratégica crucial para los intereses de la Unión Europea".
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"Es un país situado en el sur de Europa, tiene lazos indudables con Latinoamérica y cercanía geográfica con África", destaca este experto antes de hacer hincapié en que este "triángulo de relaciones" coloca a España como "una pieza imprescindible" para la construcción del nuevo liderazgo que en su opinión necesita la UE.
"La PESCO fue un paso en esa dirección, porque se construyó con el liderazgo de Francia, España y Alemania", zanja.
Pese a todo lo anteriormente expuesto, López llama la atención sobre que la influencia española en la UE puede sufrir un retroceso en función de los resultados de las elecciones europeas del próximo mes de mayo.
En concreto, señala que el auge de la formación ultraderechista Vox en Andalucía fue una "llamada de atención muy importante" ya que cualquier ascenso de esta formación podría perjudicar las aspiraciones europeístas del Gobierno actual.
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Por ello, López llama a las fuerzas progresistas a "coaligarse" para trabajar en "la construcción de una Europa social que ahora mismo no existe" y que en su opinión, además de servir para frenar a la ultraderecha, podría afianzar el proyecto de integración generando un mayor bienestar a la población.
