Este 16 de abril el presidente ucraniano, Petró Poroshenko, anunció que Kiev presentó una solicitud ante el Tribunal Internacional del Derecho del Mar en la que pide tomar "medidas coercitivas contra Rusia" para que ponga en libertad a los marineros ucranianos detenidos en Rusia por haber cruzado de manera ilegal la frontera rusa cerca del estrecho de Kerch.
"Llamamos a Ucrania a actuar de buena fe para solucionar el problema surgido por su culpa, mostrar verdadera preocupación por sus ciudadanos e implicarse en consultas en vez del litigio", dice el comunicado.
La nota indica que al presentar la solicitud ante el Tribunal del Derecho del Mar, Kiev "intenta usar esta situación, surgida como resultado de las acciones ilegales de los buques ucranianos, para alcanzar sus objetivos en la política interna".
Moscú subrayó que Kiev hizo caso omiso a los acuerdos ruso-ucranianos que permiten comenzar negociaciones para resolver las divergencias al respecto.
"Se respetan estrictamente los derechos procesales de los marineros ucranianos que utilizan los servicios de los abogados y reciben la asistencia médica. El hecho de que Ucrania esperara casi cinco meses antes de presentar la solicitud ante el Tribunal también constata la falta de urgencia", señala el texto.
El Ministerio ruso destacó que "el litigio internacional no debe impedir la investigación penal que realiza Rusia, y sus resultados no deben ser predeterminados por una decisión del tribunal internacional".
"En relación al proceso iniciado por Ucrania en base a la Convención de 1982, Rusia parte de que el Tribunal Internacional del Derecho del Mar no tiene jurisdicción para dirimir el incidente de Kerch, en particular debido a las salvedades hechas tanto por Rusia como por Ucrania sobre la inaplicabilidad de los procedimientos previstos en la Convención de 1982 en ciertas categorías de disputas", insistió.
El pasado 25 de noviembre, Rusia apresó dos lanchas artilladas y un remolcador de la Marina de Guerra ucraniana con 24 tripulantes a bordo que invadieron un sector temporalmente cerrado de la aguas territoriales rusas cerca de Crimea, avanzaron hacia el estrecho de Kerch realizando una maniobra peligrosa y desobedecieron a guardacostas rusos que intentaron pararlos.
Moscú calificó el incidente de provocación, con la que el actual presidente ucraniano Poroshenko buscaba ganar puntos de cara a las elecciones presidenciales.
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Los marineros ucranianos afrontan un juicio por cruce ilegal de frontera.
