"Las negociaciones entre Teherán y Moscú son de suma importancia y será interesante comprobar qué papel desempeñará Rusia y qué estará dispuesta a ofrecer", señaló la experta en política nuclear y seguridad estratégica en Oriente Medio.
Rouhi considera "muy inteligente la acción" anunciada por Teherán esta semana, cuando se cumplía un año de la retirada unilateral de Estados Unidos del acuerdo nuclear que suscribieron en 2015 el anterior presidente, Barack Obama, y los jefes de Estado o Gobierno de China, Rusia, Alemania, Francia y Reino Unido, además de Irán.
Las autoridades iraníes han emitido un desafío del que "no hay vuelta atrás", según la analista, y, si los firmantes no dan pasos concretos en los próximos 60 días, Teherán dejará gradualmente de cumplir los términos del acuerdo.
"Pero Irán sigue sin violar los compromisos y todavía hay espacio para la diplomacia", exclamó en una entrevista con esta agencia.
"Solo espero", añadió, "que Rusia, China y los países de la Unión Europea lleguen a un acuerdo que ofrezca a Irán un resultado tangible y unos beneficios sobre los que pueda trabajar mientras se mantiene la puerta abierta para negociaciones futuras".
"No está claro si la UE querrá o siquiera será capaz de adoptar medidas fuertes que satisfagan a Irán para que no viole el PAIC", argumentó la analista, de 35 años.
También se declara "escéptica" de la posición que tomarán Rusia y China, dada la experiencia relativamente infructuosa de la estrategia de aproximación hacia el Este que el Gobierno iraní entabló en 2005.
"Teherán necesita utilizar su relación con Rusia y China para complementar su relación con la UE, en vez de reemplazar las negociaciones con los países europeos por una orientación hacia el Este", defendió.
De cuna iraní y con estudios de doctorado en la Universidad de Cambridge (Reino Unido), Rouhi se solidariza con la "frustración de Irán con los europeos" y advierte de que mucho está en juego para ambas partes.
"La política del 'cambio de régimen' fracasará y no creo que conduzca a algo viable ni conveniente para nadie", señaló en alusión al asumido objetivo de un sector de la administración estadounidense.
"El problema es que no tienen respuesta cuando se les pregunta, ¿Y al día siguiente?; no podemos ignorar la historia y es increíble que todavía se obvien las complicaciones que pueden surgir del caos y la revuelta", protestó la investigadora.
Rouhi recuerda que la UE sufrirá los "daños laterales" que un conflicto violento generará en Irán en cuanto a refugiados, terrorismo y otros problemas ante los que EEUU "estará más inmune".
