El programa se detallará en un acto electoral en la región inglesa de Yorkshire, al que asistirán Corbyn y su portavoz en Negocios y Energía, Rebecca Long-Bailey.
El laborismo está comprometido con un programa de renacionalizaciones de industrias y servicios esenciales, como el agua, el ferrocarril o correos.
La absorción por parte del Estado de las redes de alta tensión —que se privatizaron en la década de los noventa— ha alcanzado prioridad en la campaña de los comicios al Parlamento europeo, que se celebran en el Reino Unido el 23 de mayo.
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Los laboristas marchan por detrás del nuevo Partido del Brexit, del ultraeuroescéptico Nigel Farage, en los sondeos de intención de voto.
"El cambio climático representa un riesgo para nuestro futuro, pero también una oportunidad para recuperar nuestros recursos y transformarlos a través de una revolución industrial verde", alentará por su parte Long-Bailey.
Para la "ministra en la sombra", la renacionalización está justificada en los beneficios que la industria reparte a sus accionistas y en la necesidad de "descarbonizar rápidamente nuestro sistema energético, al tiempo que reducimos el coste para las familias".
Corbyn y Long-Bailey prometerán instalar paneles solares en un millón de viviendas sociales, en un programa que será financiado por el Estado, entre otras medidas de su 'revolución industrial verde'.
