Así, el Gobierno de España respondió al ahora vicepresidente del Grupo Popular Europeo, Esteban González-Pons, quien aseguró que Escocia, de convertirse en país independiente y solicitar su adhesión a la UE, se enfrentaría al bloqueo español.
Por su parte, el cónsul aseguró, citado por El Mundo, que "esa siempre ha sido la intención del Gobierno".
Además, rechazó la afirmación de González-Pons de que Escocia tuviera que esperar en cola para entrar en la Unión Europea como Turquía o Serbia:
"La entrada no funciona, para nada, como una cola en una tienda".
Al escuchar estas palabras del diplomático español, el Gobierno de Escocia mostró su agradecimiento a Madrid "al respecto del lugar que ocuparía una Escocia independiente en la Unión Europea".
Según Nicola Sturgeon, ministra principal de la autonomía y líder del Partido Nacional de Escocia (SNP, por sus siglas en inglés), Escocia se muestra especialmente contenta "por la buena voluntad que han demostrado nuestros vecinos europeos (...) como país independiente estaremos bien posicionados para ocupar nuestro sitio, en la Unión, como iguales".
En mayo, el partido de Sturgeon obtuvo tres escaños del Parlamento Europeo tras las elecciones. En contraste, el partido del Brexit ganó solo un eurodiputado.
El Partido Nacional de Escocia no abandona sus planes de celebrar un segundo plebiscito soberanista. El primer fracasó inesperadamente en 2014.
