"¿Cómo es posible sacrificar a alguien que se puso del lado de Siria y los árabes, por las organizaciones que se confabularon en contra de Siria y están dispuestas a entablar relaciones con los invasores [israelíes]?", cuestionó Alloush al responder a la pregunta de si Siria evalúa limitar las relaciones con Irán para regresar a la Liga Árabe.
Subrayó que Teherán apoyó a Damasco en la "guerra contra Siria", además, destacó la posición de Irán con respecto a Palestina en el conflicto con Israel.
Según el diplomático sirio, la Liga Árabe dejó de ser eficaz después de que muchos Estados árabes que forman parte del organismo empezaran a prestar servicios a Israel, considerándolo su socio.
En su opinión, no vale la pena regresar a una Liga "controlada por los fondos del golfo Pérsico que "redundan en beneficio de los enemigos de la nación árabe".
Siria perdió su condición de miembro de la Liga Árabe en noviembre de 2011, después de que estallara el conflicto armado en el país, momento en el que varios países árabes retiraron a sus embajadores de Damasco.
Durante todo este tiempo, Siria, que es uno de los Estados fundadores de la Liga Árabe, no participó en las labores de la organización.
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A su vez, la Liga Árabe no participó en las negociaciones sobre la solución de la crisis en Siria, a pesar de que se trata de un país clave del mundo árabe.
A partir de este año, varios Estados árabes reanudaron el trabajo de sus embajadas en Damasco y algunos miembros de la Liga Árabe abogaron por la reincorporación de Siria a la organización.
