Este lunes, el canciller del Reino Unido, Jeremy Hunt, subrayó que tanto la autonomía de Hong Kong como los derechos y libertades de su pueblo deben ser respetados plenamente por las autoridades chinas de acuerdo con la Declaración Conjunta Sino-Británica.
Geng exigió que el Reino Unido "haga más para el desarrollo y la prosperidad de Hong Kong, y no lo contrario".
El Reino Unido no asume responsabilidad alguna por Hong Kong, asunto interno exclusivamente de China, subrayó el portavoz.
El 1 de julio de 1997 el Reino Unido transfirió la soberanía de Hong Kong a China.
De acuerdo con el principio de "un país, dos sistemas" acordado por el Reino Unido y China, el territorio de Hong Kong será autónomo hasta 2047.
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Este lunes, el aniversario de la transferencia de la soberanía británica de Hong Kong a China por primera vez se celebró en el interior de un edificio debido a las protestas, altas medidas de seguridad y la lluvia.
Al menos 13 policías fueron hospitalizados tras ser rociados por un liquido desconocido.
A principios de junio, más de un millón de personas tomaron las calles de Hong Kong para oponerse al polémico proyecto de ley de extradición que permitiría a Hong Kong entregar a prófugos a los territorios con los que no tiene acuerdos formales de extradición, como Taiwán, Macao y China Continental.
Eso podría permitir extraditar a China Continental no solo a los funcionarios corruptos fugitivos sino también a los disconformes con la política de Pekín.