"No debo ser la excusa del PSOE para que no haya un gobierno de coalición de izquierdas. Estar o no en el Consejo de Ministros no será un problema siempre y cuando no haya más vetos y la presencia de Unidas Podemos en el Gobierno sea proporcional a los votos", publicó Pablo Iglesias en su cuenta de Twitter.
No debo ser la excusa del PSOE para que no haya un gobierno de coalición de izquierdas. Estar o no en el Consejo de Ministros no será un problema siempre y cuando no haya más vetos y la presencia de Unidas Podemos en el Gobierno sea proporcional a los votos pic.twitter.com/UcBoukAj7H
— Pablo Iglesias (@Pablo_Iglesias_) 19 июля 2019 г.
El líder de Unidas Podemos explica que ese mensaje ya le fue trasladado a Pedro Sánchez y, además, apunta que ya encargó a su equipo la puesta en marcha de contactos con el PSOE para "negociar ya un acuerdo integral" en el que se traten tanto los contenidos como la composición del gobierno.
Todo ello con la vista puesta "a sacar adelante la investidura la semana que viene".
Además, Iglesias añade que los integrantes de Unidas Podemos deben ocupar un número de ministerios proporcional a la relación de escaños de la coalición izquierdista respecto al PSOE.
Esto quiere decir que Podemos reclama ocupar un tercio de los asientos en el Consejo de Ministros.
Por el momento, el PSOE no ofreció ninguna reacción al último movimiento de Iglesias.
Pedro Sánchez fue el claro vencedor en las elecciones generales del pasado mes de abril, aunque necesita el apoyo de otras fuerzas políticas para ser investido en el Congreso de los Diputados.
Actualmente, Sánchez sólo tiene garantizados los 123 votos del PSOE y uno del Partido Regionalista Cántabro.
En caso de cuajar un acuerdo con Unidas Podemos, la candidatura de Sánchez obtendría otros 42 apoyos, elevando la cuenta de votos favorables a 166, lo que allanaría el camino para que distintas fuerzas regionalistas e independentistas faciliten la investidura.
Los apoyos restantes podrían salir de formaciones como Esquerra Republicana de Cataluña (15 diputados), Junts Per Catalunya (7 diputados, de los cuales tres solo se pueden abstener al estar suspendidos), el Partido Nacionalista Vasco (6), EH Bildu (4) o la formación valenciana Compromís (1).
Esta última variante parece la más plausible dado el escenario actual, ya que la abstención ofrece a los partidos regionalistas permitir la formación de gobierno sin dar un apoyo explícito a Pedro Sánchez.