La protesta del 3 de agosto carecía de permiso, al igual que la anterior, porque los organizadores y las autoridades no habían llegado a un acuerdo sobre el lugar de la celebración de la manifestación.
Mientras tanto, los manifestantes detenidos en Moscú el 27 de julio fueron acusados de otro crimen: alteración del orden público y participación en disturbios masivos —tal y como estipula la sección 2 del artículo 212 del Código Penal de Rusia—. Violar esta norma supone penas de prisión de tres a ocho años.
"Estos ciudadanos estuvieron celebrando protestas no autorizadas durante varios días. (…) La policía prácticamente no reaccionó, pero a los que organizaron no les convenía esta situación. Empezaron a actuar: intentaron bloquear carreteras, calles, atacar a los policías. Forzaron a los policías a usar la fuerza, medida totalmente adecuada en esta situación", dijo el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin al canal TVC.
Las detenciones por violar el orden público también están previstas en las leyes de muchos países del mundo. No obstante, los medios hegemónicos bombardearon a sus lectores con artículos sobre violentas represiones por parte de las autoridades rusas. Para mostrar que esta retórica no es nada más que una doble moral, te presentamos las normas para llevar a cabo las manifestaciones en algunos países del mundo y los castigos por su violación.
España
La celebración de manifestaciones en España debe ser comunicada por los organizadores por escrito a la autoridad gubernativa correspondiente, informa el Ministerio del Interior del país.
Si la autoridad gubernativa considera que existen razones fundadas de que puedan producirse alteraciones de orden público, con peligro para personas o bienes, podrá prohibir la manifestación o proponer la modificación de la fecha, lugar, duración o itinerario.
Los promotores o directores que ejecuten una manifestación previamente suspendida o prohibida, y siempre que con ello pretendan subvertir el orden constitucional o alterar gravemente la paz pública, se castigan con penas de prisión de seis meses a un año.
En cuanto a los propios manifestantes, el artículo 557 del Código Penal menciona que quienes actuando en grupo o individualmente pero amparados en él alteraren la paz pública ejecutando actos de violencia sobre las personas o sobre las cosas, o amenazando a otros con llevarlos a cabo, serán castigados con una pena de seis meses a tres años de prisión.
Y los que porten armas, realicen actos de pillaje, se oculten del rostro, lancen objetos contundentes o líquidos inflamables, incendien el mobiliario urbano y utilicen explosivos, se enfrentarán a un castigo de hasta seis años de prisión.
Argentina
En Argentina, durante las manifestaciones también pueden ocurrir detenciones. Según el Código Penal de la Nación, los manifestantes pueden ser acusados de acciones graves que incluyen lesiones, amenazas, atentados, intimidación pública, así como cortes de rutas y resistencia a la autoridad.
Así, por ejemplo, el artículo 194 estipula que "el que, sin crear una situación de peligro común, impidiere, estorbare o entorpeciere el normal funcionamiento de los transportes por tierra, agua o aire o los servicios públicos de comunicación, de provisión de agua, de electricidad o de sustancias energéticas, será reprimido con prisión de tres meses a dos años".
EEUU
Si durante una manifestación se altera el orden público que implica actos de violencia o actos que presenten peligro o puedan causar daño a la propiedad de cualquier otra persona, los autores de estos crímenes se enfrentan a una pena de hasta cinco años de cárcel.
Alemania
Asimismo, a la policía se le otorga amplios derechos para dispersar manifestaciones que amenazan la seguridad de los ciudadanos. Tiene derecho a usar la fuerza y a adoptar medidas de carácter físico: porras de goma, gases lacrimógenos, cañones de agua y, si es necesario, armas de fuego.
Francia
En Francia, cada manifestación también debe coordinarse con las autoridades. Si la autoridad considera que una manifestación puede perturbar el orden público, la prohíbe.
Diagnostican conmoción cerebral a reportera rusa agredida por la policía en París #ChalecosAmarillos https://t.co/qE7Gm6BZCK
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) May 2, 2019
Las manifestaciones de los 'chalecos amarillos' sirven de reciente ejemplo de cómo actúa la policía francesa durante las protestas que alteran el orden público: solo en tres meses de protestas fueron detenidos 8.400 manifestantes. Los eventos fueron acompañados por duros enfrentamientos con los agentes policiales que usaron gases lacrimógenos y cañones de agua contra los participantes.