"He escuchado a algunos congresistas decir que lo mejor para solucionar la crisis es vacar (destituir) al presidente. Ésa es otra alternativa, que la propongan. Otra alternativa es lo que dice la gente: cierren el Congreso", expresó el mandatario al citado medio.
El 28 de julio, Vizcarra anunció la presentación de un proyecto de ley al parlamento para que se acorten los mandatos presidencial y legislativo en un año mediante el adelanto de elecciones generales.
Los actuales mandatos del presidente y el Congreso empezaron en julio de 2016 y deberían culminar en julio de 2021.
El proyecto del Ejecutivo propone que se celebren elecciones en abril de 2020 y en julio de ese año nuevos representantes asuman por un periodo regular de 5 años; esto con el fin de salvar lo que se considera una relación conflictiva insostenible entre ambos poderes.
El jefe de Estado ha indicado que el Congreso "se está demorando" en atender un proyecto que el Ejecutivo presentó con carácter de urgencia, enfatizando que ya va a pasar un mes desde que se entregó el texto al parlamento y éste no lo ha atendido en absoluto.
La cuestión de confianza es un mecanismo constitucional por el cual el Ejecutivo exige el apoyo del Congreso a una política o proyecto determinado, en esta caso sería el de adelanto de elecciones.
Si este apoyo es negado dos veces en un mismo periodo, el jefe de Estado tiene la potestad de disolver el parlamento y convocar nuevas elecciones legislativas.
En este periodo, el Congreso ya negó su apoyo al Ejecutivo en 2017, por lo que hacerlo una segunda vez permitiría que Vizcarra lo disuelva.
Asimismo, el presidente afirmó que el Ejecutivo le dará hasta fines de septiembre como plazo al Legislativo para que debata el proyecto, de lo contrario se evaluarían salidas alternativas para resolver la situación.