"No es cierto que la UNP pretenda debilitar los esquemas de protección de los excombatientes de FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia", afirmó el organismo a través de un comunicado difundido en Twitter.
Comunicado de Prensa
— Unidad Nacional de Protección (@UNPColombia) September 5, 2019
A propósito de un mensaje publicado el miércoles en su cuenta de Twitter por el señor Rodrigo Londoño, conocido como “Timochenko”, en el sentido de que “el gobierno decide quitar TODAS las armas de apoyo de nuestros esquemas de seguridad”, la UNP informa: pic.twitter.com/tIFYRZ1FTm
Según el texto, el pasado lunes la dirección de la UNP expidió una comunicación en la que solicitó "a los subdirectores de Protección... el reintegro a la bodega de armamento de las armas de apoyo tipo subametralladora", con el objetivo de que se "pueda ejercer un estricto control sobre todas las armas que por ley pertenecen a la entidad".
La UNP agregó que "ni el Gobierno ni la entidad escatiman esfuerzos" para proteger a los excombatientes que integran el partido de izquierda Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC, surgido tras la desmovilización de la guerrilla), de modo tal que "puedan ejercer con seguridad sus actividades políticas en el marco de la democracia".
Agregó que la UNP definirá otros esquemas de protección para los miembros de la FARC que aspiran a cargos de elección popular en los comicios del próximo octubre.
Timochenko afirmó a través de Twitter que "cuando aumentan las amenazas y los riesgos, el Gobierno decide quitar todas las armas de apoyo" de sus esquemas de seguridad.
A raíz de esto, la Comisión de Ética del partido FARC decidió expulsar a los excombatientes que volvieron a las armas, entre ellos a Márquez y Santrich.
Según cifras de la FARC y de las autoridades colombianas, desde la firma del acuerdo final de paz, suscrito en noviembre de 2016, y hasta el pasado mes de julio, 138 excombatientes de esa colectividad han sido asesinados en el país, 32 de ellos en lo que va de 2019.