"Nosotros, sin balandronadas, sin exageraciones, representamos con dignidad a nuestro país y no tenemos nada de qué avergonzarnos, se defiende la soberanía de México", respondió López Obrador en su conferencia de prensa diaria, a una pregunta sobre el comentario del jefe de la Casa Blanca.
Trump dijo el 26 de septiembre en declaraciones a periodistas, al pie de su helicóptero, que estaba "usando a México" para proteger la frontera de EEUU, "porque los demócratas [oposición estadounidense] no arreglan nuestro sistema de inmigración fracasado".
El jefe de Estado del país latinoamericano agregó que México tiene "la mano franca abierta, tendida a todos los gobiernos del mundo y abrazamos a todos los pueblos del mundo".
Trump agradeció a las autoridades del país vecino que "tienen 27.000 soldados [desplegados en las fronteras]; pero piensen qué mal está eso, que estamos usando a México".
El líder de la izquierda nacionalista mexicana enfatizó que su Gobierno no se mete "en asuntos internos de otros países, porque no queremos ningún país se meta en los asuntos de México".
El titular del Ejecutivo mexicano aludió así al escándalo en EEUU por la transcripción de una llamada que hizo Trump al presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.
López Obrador reiteró que "de manera especial nos interesa una buena relación con EEUU y una buena vecindad".
Ratificó a la vez que su diplomacia busca la "cooperación con el desarrollo y respeto mutuo".
México firmó con EEUU un acuerdo migratorio el 7 de junio pasado, en el que se comprometió a desplegar miles de efectivos de su nueva Guardia Nacional para contener el flujo migratorio en 90 días, para evitar la imposición de aranceles a sus productos de exportación con lo que amenazaba Washington.
Al cumplirse ese plazo, los arrestos que hace la patrulla fronteriza estadounidense habían disminuido casi 70%, dijo la Cancillería del país latinoamericano.