"El canciller de Chile, Teodoro Ribera, se contactó este lunes telefónicamente con su homólogo argentino, Felipe Solá, con el fin de expresarle su sorpresa respecto a los comentarios que efectuó el presidente Alberto Fernández en un programa de televisión, en que aludió a situaciones internas de Chile, y precisó la conveniencia de no emitir opiniones sobre situaciones de política interna de los respectivos países", informó la Cancillería de Chile a través de un comunicado.
Por último, el Ministerio de Relaciones Exteriores confirmó que ambos cancilleres acordaron reunirse prontamente, con el fin de abordar la agenda bilateral.
Fernández manifestó su preocupación por la crisis social que atraviesa Chile, y en una de las frases aseguró que Piñera metió presas a 2.500 personas, mientras hacía un balance de la situación de Venezuela y de Latinoamérica en general.