"Los líderes no son aquellos que llevan a la gente en una dirección inapropiada, como estamos viendo en un gran número de universidades y colegios de estudiantes, en los que multitudes provocan incendios y cometen actos de violencia en ciudades y pueblos. Esto no es liderazgo", afirmó Rawat, al intervenir en un evento público.
Su discurso fue transmitido por varios medios de comunicación indios.
"Esta prescripción se envió solo a aquellas personas que fueron grabadas por las cámaras de videovigilancia en el momento en que arrojaron piedras o dañaron propiedad pública", cita el rotativo a un funcionario de Uttar Pradesh.
Según el medio, el daño total a la propiedad pública se estima en cinco millones de rupias (70.000 dólares). Los que se nieguen a pagar la multa podrían enfrentarse a la confiscación de bienes.
Las multas deben ser pagadas el jueves a más tardar, sin embargo, los individuos en cuestión tienen derecho a recurrir la medida.
La normativa, conocida como CAA (por las siglas en inglés de Citizenship Amendment Act), simplifica el proceso de naturalización para las minorías "perseguidas" —budistas, sijes, hindúes, parsis y cristianos— de Pakistán, Afganistán y Bangladés.
Algunos críticos de la normativa alegan su carácter discriminatorio que excluye a los musulmanes, a pesar de que representan más del 10% de la población de la India, y podría allanar el camino para deportaciones de millones de adeptos del islam que se instalaron en el país hace tiempo, pero no han regularizado su situación.
El Tribunal Supremo de la India convalidó el 25 de diciembre la controvertida ley, en vigor desde la semana pasada, pero obligó al Gobierno a responder a decenas de quejas que generó la normativa y fijó la próxima audiencia para el 22 de enero de 2020.