"Las fuerzas de seguridad impidieron a muchos diputados acceder a la Asamblea Nacional y ejercer sus derechos y responsabilidades constitucionales, también se negó el acceso a los medios de comunicación; en este contexto, la elección de Luis Parra no puede ser considerada legítima ni democrática", dice el comunicado.
Los Estados miembros del grupo expresaron su convicción de que lo sucedido, "junto con la continua intimidación y retaliaciones contra miembros de la Asamblea Nacional", afecta aún más la situación en Venezuela, "creando más obstáculos al regreso pacífico a la democracia y el Estado de Derecho".
"Apoyamos a Juan Guaidó como Presidente de la Asamblea Nacional, y reafirmamos nuestro compromiso en apoyar activamente aquellos esfuerzos genuinos para lograr una resolución a la crisis en Venezuela", señaló el organismo.
El 5 de enero se llevó a cabo la elección de la junta directiva del parlamento venezolano, como lo establece la legislación nacional.

Junto con Parra también fueron juramentados Franklin Duarte como primer vicepresidente, José Noriega como segundo vicepresidente y Negal Morales como secretario.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, reconoció a la nueva junta directiva de la Asamblea Nacional, a diferencia de Estados Unidos y varios otros países, que calificaron la elección como un "golpe" en el parlamento venezolano.