"La Corporación Panamericana S.A tenía contratado el suministro de gas licuado del petróleo [GLP] que garantizaría sin afectaciones el consumo de la población y de los sectores estatal y no estatal, pero los proveedores se negaron a realizar las entregas planificadas para finales de diciembre e inicios de enero", subraya un comunicado del Ministerio de Energía y Minas, y la corporación Cuba-Petróleo (Cupet) difundido en la prensa local.
La medida fue adoptada, según el Departamento del Tesoro de EEUU, porque esta corporación es propiedad o está bajo el control de la empresa Cubametales, incluida en julio de 2019 entre las más de 200 compañías cubanas a las que se les prohíbe cualquier negocio y vínculo de entidades y ciudadanos estadounidenses.
El comunicado de Cupet agrega que, "desde el momento en que la Corporación Panamericana S.A fue sancionada, se ha estado realizando gestiones para lograr el suministro de GLP desde otros mercados, lo cual no se ha logrado concretar", y —agrega— "se continúan las acciones para lograr su importación".
Según las autoridades cubanas, las sanciones impuestas por EEUU contra Corporación Panamericana S.A y otras empresas de la isla, van dirigidas a recrudecer los efectos del bloqueo económico, comercial y financiero que Washington impuso a Cuba hace casi 60 años, que —aseguran— está diseñado para rendir por hambre al pueblo cubano.