"Tras un crecimiento de solo 0,1% en 2019, se espera que el PIB total aumente 1,3% en 2020 y 2% en 2021", indica el informe "Situación y perspectivas de la economía mundial para 2020" que publicó el organismo.
Afectadas por unas difíciles condiciones externas y una gran incertidumbre política, "las perspectivas de crecimiento en América Latina y el Caribe se mantienen débiles, lo que socava las expectativas de desarrollo", se afirma en el texto.
La actividad económica regional "se verá respaldada por una política monetaria expansiva y un repunte en la demanda interna en Brasil y México", agrega el informe.
Pero incluso esta modesta recuperación prevista está sujeta a importantes riesgos hacia la baja, tales como "un mayor deterioro del comercio mundial, una renovada volatilidad financiera y una mayor incertidumbre política".
En 2019, la renta per cápita se estancó o descendió en muchas de las economías de la región, incluidas las de Argentina, Brasil y México, según los especialistas de la ONU que redactaron el informe.
Desigualdad y pobreza
El informe señala que, desde el fin del auge de los productos básicos, la región no ha sido capaz de alcanzar un crecimiento económico significativo.
"El PIB promedio per cápita actual es 4% inferior al de 2014", afirma la ONU en el documento.
Los niveles de pobreza han aumentado, debido "una renta promedio inferior y una desigualdad persistentemente elevada", añade.
En cuanto a América del Sur, "la recuperación de un crecimiento sólido sigue siendo un objetivo difícil de alcanzar".
La ONU considera "probable que la recuperación de Brasil tome impulso a medida que mejore la confianza empresarial"
El pronóstico para la primera economía regional indica "una aceleración del crecimiento estimada de 1% en 2019 a 1,7% en 2020".
El informe se detiene también en cada uno de los países de la región.
Las proyecciones para la economía de ese país sudamericano para 2020 destacan "un tercer año consecutivo de recesión", aunque a "un ritmo menor" que el año pasado.
Entre el resto de países, se espera que Paraguay, Perú y Uruguay experimenten un notable repunte económico en 2020 sustentado en la recuperación de la demanda interna.
En América Central y México, la ONU espera una lenta recuperación de la actividad económica, después de que en 2019 el crecimiento haya alcanzado su punto más bajo en los últimos diez años.
"Aunque el pasado año la economía de México experimentó un estancamiento, la mayor laxitud de las condiciones monetarias y la reducción de la incertidumbre política deberían sustentar una modesta recuperación en 2020, con un crecimiento estimado de 1,3%", pronostica el informe.
Los expertos afirman que, debido al impacto de conflictos comerciales prolongados, "la economía mundial ha experimentado su crecimiento más bajo en una década, de solo 2,3% en 2019"
El informe advierte que la reavivación de las tensiones comerciales, la inestabilidad financiera o una intensificación de las tensiones geopolíticas, podría frustrar la recuperación, "aunque es posible experimentar un crecimiento global de 2,5% en 2020".
En un escenario negativo, "el crecimiento global se ralentizaría hasta solo 1,8% en este año", agrega el reporte.
El Secretario General de la ONU, António Guterres, advirtió que "estos riesgos podrían infligir daños graves y duraderos a las perspectivas de desarrollo".