Recesión. Una palabra que para la economía viene a ser como un sinónimo de 'peste', de un 'virus'. Y recesión es la palabra que ahora va atada a la desaceleración que ha sufrido Alemania y que durante los últimos años fue burlada por muy poco, exacerbada por un cisne negro inesperado: el coronavirus.
De acuerdo a estos tres imponderables —guerra comercial, brexit y coronavirus—, "Europa sufre más porque no venía con tanta fuerza de crecimiento como lo venía haciendo el resto del mundo antes de la desaceleración del 2019, y como consecuencia, cuando el mundo se desacelera, Europa se desacelera más y Alemania sufre. Y sufre básicamente también porque su nivel de exportaciones se ve afectado por la guerra comercial", explica el economista Luis Palma Cané.
Otro de los datos más inquietantes y reveladores de las dificultades que enfrenta Berlín es que sólo en diciembre pasado la producción industrial cayó un 3,5% respecto a 2018.
El analista incide en que al ser Alemania "la locomotora de la economía europea por ser la primera economía del bloque comunitario con más del 25% de su producto bruto, y la cuarta economía del mundo, lo que pase en Alemania pega fuerte a la economía de la UE, pero también a la economía global", indica el economista argentino.
En este contexto, y consultada por Expansión sobre si la Unión Europea pueda acabarse si hoy hay unos 'EEUU de Europa', Alicia García Herrero, economista jefe para Asia-Pacífico de Natixis y senior fellow del think tank europeo Bruegel, respondió afirmativamente.
Palma Cané coincide con este concepto. "Acá el punto crucial es si vamos a tener más o menos UE. Creo que es de vital importancia que la UE se consolide y termine de desarrollarse, porque la UE, más allá de la salida de Inglaterra que para mi es muy negativa, lo que está en juego acá es la integración de Europa: o consolidamos la Unión, o se desintegra", concluye Luis Palma Cané.