Antiguamente solía creerse que los miembros de la realeza tenían 'sangre azul', una característica que los diferenciaba del resto de los mortales. Por supuesto, se trataba de un mito inspirado en la visibilidad que cobraban sus venas azules en su piel blanca. El COVID-19 demostró una vez más que los royals no escapan a los virus.
COVID-19 en la realeza: ¿quiénes se enfermaron?
- Karl de Habsburgo-Lorena, archiduque de Austria
Legalmente, la realeza en Austria fue abolida en 1919 tras la caída del Imperio austro-húngaro. De todos modos, los descendientes de la familia Habsburgo continúan siendo influyentes en la sociedad austríaca.
"Es molesto pero estoy bien. No es la peste negra", sentenció, en relación a la cruel enfermedad que debieron enfrentar sus antepasados.
Karl de Habsburgo-Lorena dijo sentía los síntomas de "la típica gripe" pero debió realizarse el test luego de que un amigo suyo, con el que había compartido un congreso en Suiza, diera positivo en una prueba.

- Albert II, príncipe de Mónaco
Dos días después, el 19 de marzo, el principado de Mónaco comunicó que su líder, Albert II, había contraído la enfermedad. La declaración oficial remarcó que el príncipe era permanentemente "monitoreado" y que su estado de salud "no es motivo de preocupación".
El 31 de marzo, sus médicos informaron que estaba "curado" y que podía volver a sus actividades habituales.

- Charles, príncipe de Gales
El coronavirus también pasó por el Reino Unido. "El príncipe de Gales ha dado positivo por coronavirus. Ha presentado síntomas leves, pero por lo demás se mantiene en buen estado de salud y ha estado trabajando desde casa durante los últimos días, como de costumbre", señalaba un comunicado de la corona británica el 24 de marzo.
Dos semanas después, desde la Casa Real británica informaron que Carlos estaba recuperado, justo a tiempo para celebrar sus 15 años de matrimonio con Camilla de Cornualles.
- Faisal bin Bandar bin Abdulaziz Al Saud, príncipe de Arabia Saudí, y 150 parientes
El más comprometido es el príncipe Faisal bin Bandar bin Abdulaziz Al Saud, gobernador de la región de Riad, quien con más de 76 años debió ser hospitalizado en cuidados intensivos a causa de los problemas respiratorios causados por COVID-19.
El brote de coronavirus en la familia real puso en jaque a los sistemas sanitarios del país árabe, que debieron preparar unas 500 camas destinadas a integrantes de la corona.
The opening remarks by HRH Prince Faisal bin Bandar bin Abdulaziz Al Saud, the Governor of Riyadh Region, at the 2nd Riyadh International Humanitarian Forum #RIHF pic.twitter.com/7zHE08wxPn
— KSrelief (@KSRelief_EN) March 1, 2020
El rey de Arabia Saudí, Salman bin Abdulaziz al Saud, de 84 años, se mantiene aislado en un palacio para evitar ser contagiado.