En su artículo conjunto publicado en el periódico ruso Kommersant y en la revista Foreign Affairs, ellos señalaron que en 2021 comenzaría un período de desarrollo impredecible y se reduciría sustancialmente la comprensión mutua entre Rusia y EEUU sobre arsenales nucleares estratégicos de ambos si no se mantiene la vigencia del Tratado de Limitación de Armas Estratégicas (START).
"El cese de la vigencia del Tratado de Reducción de Armas Estratégicas sería una señal de peligro para la comunidad internacional, la que todavía no se ha recuperado de la pandemia", indicaron.
También señalaron que la pérdida de este tratado tendría consecuencias alarmantes para la seguridad de Rusia, EEUU y el mundo entero y podría llevar a la reanudación de la rivalidad nuclear.
A juicio de ambos diplomáticos, la pandemia de coronavirus pone al desnudo la fragilidad del sistema internacional, los momentos como el actual son absolutamente inoportunos para minar o debilitar los elementos clave de este sistema, especialmente en la esfera nuclear.
"Nuestros países, en su calidad de las mayores potencias nucleares, desde hace medio siglo están encabezando el proceso de limitación de las armas y las tecnologías nucleares. Hoy día es más importante que nunca desarrollar los máximos esfuerzos para que nunca estalle una guerra nuclear, en la que no puede haber vencedores", indicaron Antónov y Gottemoeller, agregando que no existe una forma mejor de hacerlo comprender a los pueblos del mundo que la de prorrogar el Tratado START.
El último tratado de limitación de armas estratégicas, el START III, suscrito entre Rusia y EEUU en 2010 limita la cantidad de los misiles balísticos intercontinentales desplegados, de los misiles balísticos que pueden llevar los submarinos y de los bombarderos provistos de armas con ojivas nucleares.
Además recordó que Moscú y Washington hacia finales de marzo de 2020 efectuaron 328 inspecciones en el marco de este tratado, expertos rusos y estadounidenses visitaron bases de misiles balísticos intercontinentales, submarinos provistos de misiles balísticos y bombarderos pesados.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia informó hace poco que las nuevas inspecciones en el marco de este tratado se posponen y se reanudarán por acuerdo mutuo de las partes cuando se normalice la situación provocada por coronavirus.
El Tratado START juega un importante papel en el fortalecimiento de la transparencia y la predecibilidad, porque "se basa en los principios de igualdad y el equilibrio de intereses", destacaron Gottemoeller y Antónov, además señalaron que "el régimen de verificación de este tratado tiene carácter recíproco y ha probado su eficacia".
Al mismo tiempo el viceministro de Exteriores de Rusia, Serguei Riabkov, reveló hace poco que Moscú todavía no ha recibido de Washington la respuesta a su nota sobre la posibilidad de prorrogar el tratado START, también dijo que todo indica a que Washington probablemente tome la decisión de no prorrogarlo.