Los analistas creen que, sin cooperación, los estados latinoamericanos, sumergidos en una gran desigualdad y débiles ante las presiones externas, se exponen a los deseos de las potencias, sin poder defenderse de ellos.
El especialista, quien también fue director del Programa de Relaciones Internacionales de la Fundación Chile 21 desde 2010 hasta 2014 y fue director de Coordinación Regional del Ministerio de Relaciones Exteriores entre 2006 y 2010, dijo que debería haber una coordinación mayor en el cierre de fronteras, en protocolos sanitarios unitarios y en los viajes para retornar connacionales.
"Por ejemplo, podríamos habernos puesto de acuerdo para que Brasil, Argentina y México empezaran a producir respiradores, hacer fondos en conjunto, negociar con el resto del mundo la compra de insumos, pero lamentablemente no lo hemos hecho", reflexionó.
Por su parte, el licenciado en Ciencias Políticas y profesor de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales en Ecuador (FLACSO), Lester Cabrera, dijo a Sputnik que en el combate de la pandemia los países latinoamericanos han mostrado un enorme déficit al momento de ponerse de acuerdo en términos "muy básicos" para establecer medidas estandarizadas con respecto al COVID-19.
El 5 de abril el Mercosur anunció que reservará 16 millones de dólares para un proyecto sobre "Investigación, Educación y Biotecnología aplicadas a la Salud" enfocado en luchar contra el nuevo coronavirus.
El bloque regional que integran Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay articulará a las autoridades de los cuatro países para mejorar sus capacidades en la realización de diagnósticos que detecten el virus SARS-COV-2.
Resurgimiento del Estado
Fuentes afirmó que los distintos gobiernos privilegiaron la respuesta nacional frente a la pandemia en vez de fortalecer la cooperación regional.
"Estamos pasando por un momento internacional donde hay un nacionalismo más proteccionista. Estamos hablando que lo hace la primera potencia económica del mundo como es EEUU. Estamos pasando por un momento en que la globalización en algunos aspectos se debilita", señaló.
Por su parte, Cabrera afirmó que la pandemia llegó en un momento donde muchos países latinoamericanos tienen "serios" problemas económicos y financieros.
"La pandemia genera que los países velen por sí mismos y lo que puede pasar al otro lado de la frontera les tiene con muy poco cuidado. Además, los gobiernos tienen una billetera muy delgada como para cooperar y brindar suministros a otros países", explicó.
"Debemos acordar cosas que realmente podamos hacer y que las cuidamos entre todos, aunque seamos de izquierda, centro o derecha. Esto no es solo pragmatismo, ponernos de acuerdo en la defensa de los derechos humanos o la democracia, esos son valores, que cubren varias visiones políticas. Con el respeto necesario de la diversidad, eso también es un valor, pero es pragmático, porque si no hacemos eso, cuando un Gobierno de derecha acuerda algo, una administración de izquierda lo va a abandonar", reflexionó.
Sin cooperación y con pocas expectativas, América Latina tendrá que enfrentar en los próximos meses la peor contracción económica desde 1900, ya que decrecerá un 5,3%, según datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Además, casi 30 millones de personas en América Latina pasarán a la pobreza y 37,7 millones de personas estarán desempleadas a partir de la pandemia del COVID-19.