La mujer, de 46 años, llegó a una clínica en el estado La Guaira, en el norte de Venezuela, el pasado 28 de enero, con un fuerte dolor del lado derecho del abdomen que casi no le permitía caminar.
Holiday estaba muy nerviosa. Con lágrimas en los ojos, le pedía al alma de su mamá, que había muerto un mes antes, que la ayudara a salir bien de la operación. Pero la ayuda milagrosa llegó de otra manera.
"Se me apareció un médico con un gorro y una bata azul, con guantes y tapabocas, pero yo no lo había reconocido. Empezó a quitarme los electrodos que tenía conectados en mi cuerpo. Le pedí que no lo hiciera porque los médicos estaban afuera del quirófano y ya iban a entrar a operarme", contó la mujer a Sputnik.
"Me desperté y él estaba ahí todavía, pero ya yo no tenía dolor, no tenía nada. Entonces se quitó el gorro, el tapabocas. Me dio una crisis y empecé a llorar. Era él, blanco, de bigotes negritos, ni tan alto ni tan bajito. Lo reconocí, era José Gregorio Hernández", contó.
Holiday se refiere al llamado "Médico de los pobres", de cuya muerte se cumplen este lunes 101 años, y a quien el Vaticano le reconoció oficialmente el 19 de este uno de sus supuestos milagros, abriendo el camino a su beatificación, esto es, un paso previo a ser considerado "santo". Actualmente, la Iglesia Católica lo considera "venerable".
Cuando la mujer bajó la mirada y se sentó en la camilla, el médico de voz suave y manos tibias desapareció. Ella salió caminando del quirófano como si nunca hubiese tenido el fuerte dolor. Los médicos que esperaban afuera, mientras ultimaban los detalles de la intervención quirúrgica, se sorprendieron al verla. Holiday les contó lo que había vivido, pero ellos la miraron con escepticismo.
Ciencia
El médico Anibal Loreto era uno de los cirujanos que operarían a Holiday. Para él, no hay explicación científica de lo que ocurrió ese día.
"La vi parada en la puerta del quirófano cubierta con una manta. Le pregunté qué hacía ahí, porque le habíamos dicho que se quedara adentro acostada. Ella me cuenta que un doctor que estaba adentro le dijo que se fuera porque no tenía nada. Cuando me contó eso le dije que adentro no había nadie, porque los únicos que estábamos éramos nosotros y no había entrado más nadie", detalló.
El profesional aseguró que, para ese momento, Holiday no presentaba ninguno de los síntomas con los que había ingresado horas antes a la clínica.
Al día siguiente, le realizaron nuevos exámenes y los resultados no presentaron ningún problema.
Loreto documentó ese hecho y junto a la paciente lo presentó a la curia de Macuto, localidad en el este de La Guaira. La Iglesia Católica procederá para que ese caso sea estudiado y pueda ser presentado como un nuevo milagro del "beato".
Venerable
Gregorio Hernández murió un 29 de junio de 1919 tras haber sido arrollado por un automóvil en la Pastora, en el oeste de Caracas.
Por varios años, muchos venezolanos esperaron lo que se concretó el 19 de junio, cuando el papa Francisco aprobó el decreto que da inicio al proceso para que Gregorio Hernández se convierta en "beato" de la Iglesia Católica, el último paso antes de ser "santo".
Gregorio Hernández tiene muchos fieles devotos que le atribuyen diversos milagros relacionados con la salud. Además, es venerado porque en vida ayudó a los más necesitados.
La niña, que sufrió pérdida de masa encefálica, llegó después de cuatro horas al hospital más cercano y fue sometida a una cirugía de la que, alertaron los médicos, saldría con secuelas.
Sus padres y familiares oraron a José Gregorio Hernández y la pequeña se recuperó y salió del hospital en perfecto estado de salud.
Según el Vaticano, la ceremonia de beatificación podría efectuarse en abril de 2021.