La Procuradoría General de la República ya había pedido que Ribeiro sea interrogado por la policía, y ahora el juez Toffoli determinó que "debe ser autorizada la providencia requerida [la declaración] para que se pueda instruir una eventual petición de instauración de investigación", según adelantó el portal de noticias local G1.
A finales de septiembre, el ministro de Educación, que también es pastor evangélico, dijo en una entrevista con el diario "Estado de Sao Paulo" que a veces los adolescentes "optan" por el camino del "homosexualismo" (sic).
Añadió que esto se debe a que son hijos de familias "desajustadas", donde falta atención del padre o de la madre.
La Procuradoría General de la República cree que estas declaraciones pueden constituir una infracción penal, al inducir o incitar discriminación o prejuicio.
El delito de homofobia existe en Brasil desde el año pasado, cuando el Tribunal Supremo Federal lo equiparó al delito de racismo, y las penas pueden llegar a los cinco años de cárcel en los casos más graves.