Este aumento eleva a 1.240.697 el total de afectados por la enfermedad desde que comenzó la crisis sanitaria en España, según el último balance publicado por el Ministerio de Sanidad español.
Además, el número de víctimas mortales por el coronavirus subió a 36.257 tras notificarse otras 379 muertes desde la semana pasada.
En los últimos días siguió creciendo la incidencia acumulada del virus en España, con 521 casos por 100.000 habitantes frente a los 410 que se registraron una semana atrás.
A nivel nacional, uno de los datos que sigue empeorando es la ocupación hospitalaria con un 15,5% de las camas de todo el país ocupadas por pacientes de COVID-19.
El porcentaje asciende a casi el 30% en el caso de las unidades de cuidados intensivos (UCI).
España se encuentra desde el 25 de octubre bajo un nuevo estado de alarma que incluye un toque de queda nocturno y permite que cada región aplique confinamientos perimetrales, una medida a la que se acogieron 15 de las 17 comunidades autónomas del país.
Pese al empeoramiento progresivo de la situación epidemiológica en el país, el Gobierno español no contempla por ahora la posibilidad de ordenar el confinamiento domiciliario de la población, según trasladaron fuentes del Ministerio de Sanidad a los medios.