¿Por qué la industria petroquímica europea tiene un futuro sombrío?
00:50 GMT 23.11.2023 (actualizado: 07:14 GMT 23.11.2023)
© Foto : @BASF
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Los altos costos de producción y la regulación excesiva de la industria petroquímica en la Unión Europea (UE) han colocado a este sector económico en el 'corredor de la muerte', de acuerdo con un análisis publicado por la agencia especializada Bloomberg.
Un ejemplo de ello es el etileno, un componente básico de los plásticos. Resulta más barato comprarlo en Texas y enviarlo a Europa a través del Atlántico para su posterior procesamiento, que producirlo internamente en el bloque europeo.
De cualquier manera, señala el análisis, Europa sigue consumiendo cantidades voraces de espumas, pinturas, resinas y cualquier otro producto que elaboren las fábricas petroquímicas, pero no ha hecho más que sustituir la producción interior por material importado.
"La última vez que las plantas petroquímicas europeas procesaron tan poca cantidad de su materia prima favorita, el grupo sueco ABBA era el más popular del continente y la Caída de Saigón había marcado el final de la guerra de Vietnam. Era 1975 y la región aún se lamía las heridas de la primera crisis del petróleo. Casi medio siglo después, la industria agoniza", señala Bloomberg.
De acuerdo con el análisis, este fenómeno ha resultado en la pérdida de actividad económica en Europa, una erosión de la balanza comercial de productos químicos del bloque y, en última instancia, la baja de puestos de trabajo y de seguridad energética.
15 de noviembre 2023, 11:48 GMT
Según el análisis, el consumo europeo de nafta –una de las materias primas con las que funciona la industria petroquímica-- caerá este año a su nivel más bajo en 48 años: 34,2 millones de toneladas métricas. El consumo ha descendido un 18,5% respecto a los niveles anteriores a la crisis de COVID-19 y casi un 40% por debajo del máximo histórico alcanzado hace dos décadas.
"Con un procesamiento tan bajo, los caballos de batalla de la industria, llamados craqueadores de vapor, donde la nafta y el gas se transforman en componentes químicos, funcionan a ritmos antieconómicos", señala.
"Debido a sus enormes costos fijos, las empresas suelen hacer funcionar sus craqueadores de vapor lo más cerca posible de su capacidad a lo largo del año. Todo lo que esté por debajo del 90% es motivo de preocupación; el 85% es malo, y el 80% se considera catastrófico. En los últimos trimestres, sin embargo, han funcionado con pérdidas entre el 65% y el 75% de su capacidad", explica.
Según el artículo, las empresas europeas se están adaptando en consecuencia y enviado sus inversiones a países como China.
De acuerdo con estimaciones del banco de inversión Jefferies Financial Group, en las empresas químicas europeas la proporción del gasto en nuevos proyectos destinados a Asia se ha disparado en torno al 50% durante la última década y media.
12 de noviembre 2023, 10:29 GMT
Antes de la pandemia, la balanza comercial de productos químicos de Europa con el resto del mundo solía arrojar un superávit de 40.000 millones de dólares. El año pasado, el superávit se redujo a solo 2.500 millones de dólares. Aunque es probable que se recupere algo en 2023, las perspectivas para 2024 son sombrías, afirma Blas.
"Si Europa quiere conservar parte de su antiguo poder industrial, los responsables políticos deben apoyar públicamente a la industria petroquímica, aunque sea impopular entre los votantes preocupados por el clima", observa Bloomberg.
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