Se trata de los ultras de dos clubs de fútbol de la misma ciudad, el Betis y el Sevilla.
Los detenidos fueron detenidos tras participar en una pelea que convirtió un bar de copas en escenario de una auténtica batalla campal, según informó la policía local.
Los hinchas habían quedado "para pegarse", según informaron los agentes.
La Policía Local y la Nacional intervinieron y el saldo se limitó a un herido leve, "con traumatismo craneal y herida abierta".
Los detenidos, de entre 20 y 30 años de edad, se encuentran ahora mismo en dependencias policiales.