Internacional

El jefe de la CIA testificó en el caso sobre la 'huella rusa'

MOSCÚ (Sputnik) — El director de la CIA, Mike Pompeo, y la ex fiscal general de EEUU, Sally Yates, declararon en el marco de la investigación del FBI sobre la supuesta injerencia rusa en las elecciones estadounidenses en noviembre de 2016, informó la NBC citando fuentes cercanas a la situación.
Lea en Sputnik

Según fuentes del canal, Yates "cooperó" con la investigación del consejero especial Robert Mueller, mientras el actual jefe de la CIA testimonió en el caso.

Director de la CIA: EEUU debe "hacer retroceder" a Rusia en todos lados
Además, el director de inteligencia nacional, Dan Coats, y el director de la Agencia de Seguridad Nacional, Michael Rogers, fueron "testigos secundarios" del despido del exjefe del FBI, James Comey.

Se informa también que el 24 de enero de 2017 el exasesor para la seguridad nacional, Michael Flynn, mantuvo una reunión secreta con agentes del FBI respecto a sus relaciones con el entonces embajador ruso, Serguéi Kisliák.

El presidente de EEUU, Donald Trump, y la Casa Blanca no estaban al tanto del encuentro.

Le puede interesar: Zajárova saca su lado más fiero contra el director de la CIA

Una de las fuentes dijo también al canal que la reunión fue confirmada por el ex vice director del FBI, Andrew McCabe.

Se prevé que el equipo de Mueller también interrogue el 31 de enero al exasesor del presidente Trump, Stephen Bannon.

"Las palabras de Pompeo significan que la presidencia de Obama fue mérito de Rusia"
El Congreso de EEUU investiga la supuesta injerencia de Rusia en las elecciones presidenciales de 2016, que habría incluido hackeos, filtraciones y uso de medios de información y redes sociales a favor del candidato republicano.

También el FBI lleva a cabo una pesquisa, conducida por el consejero especial Robert Mueller, sobre la presunta colusión entre el equipo de campaña de Trump y Rusia.

Lea también: Rusia: la injerencia rusa es una idea fija de los medios de EEUU

El Gobierno ruso ha refutado repetidamente esas acusaciones, a las que tacha de absurdas y de intentos de distraer la atención del público estadounidense de otros asuntos internos. 

Discutir