El incidente, que ocurrió a las 6:53 hora local (3:53 GMT), redujo la producción de la energía en 1.000 megavatios, pero no afectó a los consumidores, pues a los pocos minutos se aprovecharon las capacidades disponibles en la central hidroeléctrica de Zainsk (Tartaristán) y en dos centrales térmicas, una en Moscú y la otra en Yaroslavl, en el marco del Sistema Energético Único.
"No se observó una violación de los límites ni de las condiciones de explotación, tampoco hubo consecuencias radiactivas", dice el comunicado. La avería se está reparando.
"Un equipo de bomberos roció con agua el casco del transformador para refrigerarlo (…) La situación ya está arreglada", aseguró el ingeniero, citado por la oficina de prensa de la central.
Situada a unos 40 kilómetros al oeste de Kursk y operativa desde 1976, la planta nuclear dispone de cuatro reactores del modelo RBMK, de 1.000 megavatios cada uno.
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