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Spotify y su lado más oscuro

Spotify es la empresa de música en streaming más escuchada. Con más de 70 millones de suscriptores pagos, cambió la forma de acceso al material discográfico. Una plataforma a la que siguen de cerca Apple Music y la más reciente Tidal. Su éxito se visualiza en el incremento de usuarios, aunque para los músicos aún no sea tan claro el rédito.
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El modelo de Spotify permite el acceso a música gratuita, y también la posibilidad de contar con un usuario Premium con costo. Pero no es la única, en Estados Unidos la compañía comenzó a notar la competencia de sus rivales más cercanos como Apple Music, que está aumentando sus suscriptores.

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Otra aplicación que está pisando fuerte es Tidal, el primer servicio que es propiedad exclusiva de artistas y no de corporaciones ni empresas. Esta plataforma se promociona como la que mayor porcentaje paga a los artistas en concepto de derechos de autor.

Un dato no menor. El monto de las regalías a los músicos es una de las críticas más importantes que tiene este servicio. Aunque la compañía se muestra reacia a dar a conocer cifras, en algunas ocasiones ha declarado que paga ‘entre 0,006 y 0,0084 dólares' por reproducción.

"Supongo que es algo que se tiene que ir calibrando, y que hace falta. Porque pareciera que todo el mundo se beneficia, menos la gente que crea los contenidos", señaló a Sputnik Ezequiel ‘Cheky' Bertho, músico venezolano, radicado en México, líder del proyecto Algodón Egipcio.

En 2014 un caso que generó polémica fue el de la cantante Taylor Swift; una de las pocas figuras que aún vende millones de discos. Ese año la artista decidió sacar su música de Spotify y de Apple Music.

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La explicación de Swift al salirse fue que consideraba que el acceso a los materiales de manera gratuita generaba efectos negativos para los músicos. El gesto fue recibido como un golpe duro por parte de estas empresas. Aunque no pasó mucho tiempo para que la solista anunciara su regreso sin condiciones.

Estar o no en este tipo de plataformas es un conflicto que tienen los músicos. En el caso de la compositora estadounidense su situación es privilegiada. Sin embargo el formato de estas plataformas genera más dudas para los artistas que se encuentran por fuera del circuito de la gran industria.

"A veces puede ser frustrante. Porque sientes que no tienes en tus manos las llaves para acceder a un mundo que sabes que está ocurriendo. No tienes la menor idea de a quién acercarte o con quién hablar para ser parte de ese mundillo, del apoyo, el impulso y la promoción", indicó Ezequiel ‘Cheky' Bertho.

 

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