"El procesado fue declarado culpable de (…) incitaciones y llamamientos a deportaciones, de perseguimiento como crímenes de lesa humanidad, y es sentenciado a 10 años de privación de libertad; la Corte también considera cumplida su condena que pasó del 14 de febrero de 2003", dijo el juez Teodor Meron.
En noviembre de 2014 fue puesto en libertad condicional para someterse a un tratamiento en Serbia, y a finales de marzo de 2016 fue absuelto por el TPIY.
Sin embargo, la fiscalía del TPIY anunció en mayo de 2016 que recurriría la sentencia, argumentando haber encontrado grandes errores en el fallo.
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En diciembre de 2017, el Mecanismo para los Tribunales Internacionales (MICT) empezó a examinar la apelación de la fiscalía, que pedía 28 años de prisión para el líder de los ultranacionalistas o empezar un nuevo proceso.