El embajador español, Manuel Gómez-Acebo, ha tenido que presentarse en el Ministerio de Exteriores, en Jerusalén, para dar detalles sobre el apoyo de Madrid a la propuesta del Consejo, con sede en Ginebra, que aprobó enviar una misión internacional para investigar posibles violaciones de los derechos humanos por parte de Israel en las protestas de miles de personas en Gaza.
La última ola de protestas en Gaza empezó el 30 de marzo, jornada en que los palestinos celebran el Día de la Tierra. Desde entonces se han llevado a cabo manifestaciones todas las semanas que se han saldado con 114 muertos y casi 13.000 heridos.
Solamente el 14 de mayo murieron 62 palestinos por fuego de soldados israelíes, que según testigos, dispararon indiscriminadamente contra los manifestantes.
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Posteriormente fallecieron dos personas más heridas ese día, en que las manifestaciones eran en protesta por el traslado de la Embajada de EEUU a Jerusalén y para reivindicar el derecho al retorno de los refugiados palestinos. La gran mayoría de la población gazatí está integrada por refugiados.