Al Sisi asumió la presidencia del país en una ceremonia celebrada en el Parlamento de Egipto.
Al intervenir en la ceremonia de su investidura, el presidente declaró que durante su mandato dedicará especial atención a la sanidad y la educación.
"Me centraré en los problemas de educación, sanidad y cultura", dijo al agregar que su prevé lanzar una serie de proyectos encaminados a mejorar la vida de los egipcios.
Al Sisi indicó que durante su primer mandato Egipto afrontó grandes desafíos como el terrorismo y problemas económicos.
Al hablar de la política exterior, Al Sisi señaló que El Cairo seguirá reforzando las relaciones con sus socios, pero sin intervención en conflictos de otros países, respetando su soberanía y su integridad territorial.
El presidente gobernará el país por otros cuatro años, hasta 2020.
Al Sisi ganó los comicios presidenciales celebrados en marzo con más del 97% de los votos y con la afluencia electoral del 41,05%.
El general Al Sisi tomó el poder en 2013 mediante un golpe de Estado cuando ostentaba los cargos de comandante en jefe del Ejército y presidente del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas; y en 2014 ganó unas elecciones presidenciales que él mismo convocó.
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