Los ingenieros de la empresa conjunta KNDS, creada en 2015, optaron por colocar en la probada y duradera plataforma alemana la moderna torreta francesa, dotada, principalmente, con un mecanismo de recarga automática.
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Los expertos destacan que el prototipo fue creado por iniciativa propia del consorcio, sin la participación de los respectivos Gobiernos.
El hipotético EMBT deberá entrar en servicio para 2030 y estará dotado con un nuevo cañón de 130 o 140 milímetros, un nuevo motor y sistemas de control de fuego y protección activa modernizados.
En los ochenta, un proyecto semejante buscó combinar el 'chasis' alemán con la torreta británica, y anteriormente los fabricantes de tanques de Europa y EEUU ya habían lanzado iniciativas conjuntas.
No obstante, esos proyectos jamás tuvieron éxito, concluye el medio.
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