"Para mí este acuerdo dañoso, único en la historia de la humanidad, es indigno e inadmisible, está encaminado a destruir la Constitución, las leyes, las instituciones estatales, no voy a legalizar este diletantismo político", dijo en un mensaje para la nación.
El ministro de Asuntos Exteriores de Grecia, Nikos Kotzias, por su parte, comunicó que Atenas espera completar las negociaciones con Skopie sobre la delimitación de fronteras a principios de julio.
"Muy pronto, espero que a principios de julio, concluiremos las negociaciones sobre cuestiones como demarcación de fronteras, zonas marítimas, etcétera", dijo Kotzias.
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El acuerdo correspondiente se logró durante una conversación telefónica que el primer ministro griego, Alexis Tsipras, y el primer ministro de Macedonia, Zoran Zaev, mantuvieron el 12 de junio.
Atenas reclamó el cambio de nombre de la república vecina alegando que puede ser confundida con la región griega de Macedonia y bloqueó el ingreso de Skopje en la UE y la Alianza Atlántica.
Al menos 120 estados reconocieron el nombre constitucional del país, República de Macedonia, la primera fue Rusia en 1992.
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El país forma parte de las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales con el nombre "ex-República Yugoslava de Macedonia" por la postura de Grecia.