En presencia de unos 250 invitados y en el único discurso oficial que ha pronunciado en su visita de tres días a Israel y Palestina, el duque de Cambridge dijo: "Mi mensaje esta noche es que no se os ha olvidado".
"Ha sido una experiencia muy potente conoceros a vosotros y a otros palestinos que viven en Cisjordania y oír vuestras historias. El Reino Unido está con vosotros, mientras trabajamos juntos por un futuro próspero y pacífico", afirmó el príncipe, que saludó en árabe.
"Durante el día he conocido a palestinos de diversas procedencias y múltiples lugares, incluida Gaza. He visto [el campo de refugiados de] Jazalone, las tremendas dificultades de la vida en esas condiciones, los recursos limitados y la falta de oportunidades", señaló Guillermo ante una audiencia mayoritariamente de jerosolimitanos palestinos.
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Guillermo, que elogió la "vibrante cultura" palestina, la poesía, literatura, la tradición de erudición "y la importancia que le dais a la educación" recordó que la región de Oriente Medio "tiene una historia complicada y trágica".
"En el último siglo, los pueblos de Oriente Medio han sufrido una gran tristeza y una gran pérdida. Nunca se ha necesitado tanto la esperanza y la reconciliación. Sé que comparto un deseo con todos vosotros y con vuestros vecinos, el de una paz justa y duradera", añadió ante los invitados, entre los que se encontraban representantes de todas las comunidades religiosas de Jerusalén.
Después de su discurso, Guillermo estuvo conversando con grupos de personas entre los que había palestinos de Gaza, de organizaciones juveniles y algunos políticos.
Mañana, el príncipe, primer miembro de la familia real británica que visita Israel y Palestina de forma oficial desde la creación del Estado de Israel hace 70 años, visitará la tumba de su bisabuela, la princesa Alicia de Battenberg, en el Monte de los Olivos y luego realizará un recorrido por algunos de los lugares santos más emblemáticos de la Ciudad Vieja de Jerusalén.