"Se espera que el centro inaugure su trabajo en 2019, de momento siguen sin determinarse los parámetros principales de la nueva estructura", dijo Búrtsev en la reunión de los centros de coordinación interministeriales de Rusia y Siria que trabajan para devolver a los refugiados a Siria.
El diplomático ruso agregó que la Organización Internacional para las Migraciones se mostró dispuesta a colaborar en la devolución de los refugiados.
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Sin embargo, puntualizó, la decisión final sobre el nuevo Centro se basará en las evaluaciones del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).