Una tormenta desencadenada el sábado sobre el estrecho de Kerch hizo que se rompiera el amarre de una grúa de pontón y que la tripulación, consecuentemente, perdiera el control del vehículo, que fue empujado hacia el puente de Crimea. La grúa solo dañó parte de la valla protectora del puente, según el servicio de prensa de la carretera de Taman, y agregó que no se sufrieron lesiones graves como resultado del incidente.
La tormenta hizo imposible que otros barcos vinieran en ayuda en el trascurso de varias horas. Sin embargo, una vez calmada la tempestad, pudieron remolcar la embarcación a una distancia segura.
Después del temporal, el tráfico en el lado izquierdo del puente quedó limitado debido al accidente con la grúa.