"El Índice Nacional de Precios al Consumidor [INPC] presentó un crecimiento mensual de 0,52%, así como una tasa anual de 4,9%", informó el organismo.
Al descartar los precios de los productos y bienes de consumo, que son afectados por los mercados internacionales o las estaciones del año, como las mencionadas tarifas de energéticos, el transporte y los agropecuarios, el llamado "índice de precios subyacente" se comportó más cerca de la meta.
Los precios subyacentes de esa cesta de productos registraron un aumento mensual de 0,31%, alcanzando una tasa anual de 3,73%, en el rango de la meta.
Sin embargo el índice de precios "no subyacente", que incluye a energéticos como el gas y la gasolina se incrementó 1,15% durante octubre, disparando su alza anual a 8,50% comparado con el mismo mes de 2017.
Al interior del "índice subyacente", los precios de las mercancías subieron 0,24% y los de los servicios 0,39% mensual.
Las estimaciones de inflación de especialistas reflejan el pesimismo en los círculos financieros para los años 2018 y 2019, según la encuesta mensual del Banco de México (Banxico, central), publicada el 1 de noviembre pasado.
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Ese sondeo, en el que participan expertos de 29 grupos de análisis y consultoría económica nacionales y extranjeros, proyecta que "la expectativa de la inflación fue modificada en la encuesta de octubre, con un pronóstico que subió en un mes de 4,56 a 4,62% en 2018", según la encuesta del banco.
Con esos datos, el Banco de México tomará su próxima decisión de política monetaria para contener la inflación, el jueves 15 de noviembre.
Los analistas financieros estiman que la institución autónoma del Estado podría aumentar la tasa de referencia entre 25 o 50 puntos base desde el 7,75% actual a un rango de 8,0 a 8,25% anual.