Se trata de una versión en miniatura del legendario ejército de terracota. El tamaño de las figuras —que representan a soldados de caballería y de infantería en formación cuadrada— oscila entre los 20 y los 30 centímetros.
Además de las figuras de militares, los arqueólogos también hallaron pequeñas estatuas que representan a músicos, así como un teatro en miniatura, además de cuatro torres de vigilancia de 140 centímetros de altura.
En total, los investigadores chinos descubrieron alrededor de 300 figuras de terracota.
Según explicaron los científicos a la revista especializada Chinese Cultural Relics, la tumba pudo haber pertenecido al príncipe Liu Hong, hijo del emperador Wu, que reinó entre los años 141 y 87 a.C.
En cuanto a las figuras, fueron construidas un siglo después del ejército de terracota original.