"La TSA continuará brindando durante este cierre parcial del Gobierno la seguridad rigurosa que siempre brinda. Los viajeros no verán ninguna diferencia en la seguridad", explicó el portavoz el jueves.
"No se les pagará durante el cierre; sin embargo, históricamente se les ha pagado una vez terminado el problema", dijo Gregory.
El cierre parcial del Gobierno comenzó el sábado debido a una disputa entre el Congreso y el presidente Donald Trump sobre el financiamiento para la construcción de un muro en la frontera de EEUU con México.
El presidente Trump solicitó más de 5.000 millones de dólares para construir el muro, mientras que los legisladores del opositor Partido Demócrata en el Congreso se oponen a la idea de levantar una barrera física en la frontera.
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La TSA se encarga de mantener la seguridad de todos los centros de transporte de EEUU, aunque en los últimos años ha sido muy criticada por maltratar a los pasajeros y hacer un "teatro de la seguridad".