"Es verdad que nuestros instructores trabajan allí [en Sudán], llevan trabajando allí un tiempo considerable y lo hacen en el marco de las relaciones bilaterales ruso-sudanesas, en legitimidad absoluta", dijo Peskov a la prensa.
La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova, calificó ese informe de "una nueva provocación política, que no corresponde a la realidad".
Zajárova confirmó que en Sudán trabajan representantes de empresas rusas de seguridad privada, pero aseguró que no están vinculadas con las autoridades rusas.
A la vez subrayó que las funciones de esas compañías se limitan al entrenamiento del personal de las fuerzas del país norteafricano.
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