En las imágenes se puede ver una aproximación aparentemente rutinaria que hacen los cazas de la OTAN para identificar a las naves rusas. No obstante, el caza de fabricación estadounidense empieza a acercarse a una distancia imprudente al avión del Gobierno ruso y el piloto ruso del Su-27 no tarda en reaccionar.
Primero se adelanta al F-15 y con una maniobra agresiva prácticamente lo empuja lejos de la aeronave que está escoltando.
Según destaca el medio Ruskoe Oruzhie, la protección de los aviones gubernamentales, incluido el presidencial, es una de las misiones de las Fuerzas Aeroespaciales de Rusia.
Aparte de sus funciones de estatus, realizan una auténtica misión de combate, puesto que en caso de ser atacados deben proteger los aviones gubernamentales a toda costa.
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