"Esta huelga va más allá de lo que tradicionalmente se ha entendido como huelga general. Esta huelga nos hace parar en el ámbito laboral, pero también en otros trabajos y espacios: el de los cuidados, el consumo y la vida estudiantil y asociativa", reza un manifiesto difundido por la Federación Estatal de Organizaciones Feministas.
Las plataformas convocantes denuncian que las vidas de las mujeres "siguen marcadas por las desigualdades, por las violencias machistas y por la precariedad" tanto en España como en el resto del mundo.
Por ello, animan a las mujeres a detener su actividad y salir a la calle para "subvertir el orden del mundo y el discurso heteropatriarcal, racista y neoliberal".
"Somos un movimiento internacional diverso que planta cara al orden patriarcal", prosigue el manifiesto, en el que se propone que los hombres actúen como "aliados" apoyando en la medida de lo posible a que las mujeres puedan realizar la huelga.
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Pese a que los colectivos feministas son los protagonistas de los paros, la convocatoria de huelga está respaldada por los principales sindicatos del país.
Los paros también cuentan con el apoyo de buena parte de los partidos políticos del país, sobre todo de los progresistas.
Por ejemplo, las integrantes de Podemos se unirán a los paros y cesarán toda su actividad para el 8 de marzo.
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El Gobierno de España, integrado en su mayor parte por políticos del PSOE, también redujo sus actos previstos, aunque todas las ministras mantendrán la cita semanal para la celebración del Consejo de Ministros.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reiteró su apoyo al movimiento feminista porque, a su modo de ver, "solo desde el feminismo lograremos una democracia plena".
El conservador Partido Popular, primer partido de la oposición, ni secundará la huelga ni acudirá a las manifestaciones al considerar que el movimiento feminista está cooptado por la izquierda.
El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, llegó a decir que las celebraciones "dividen a la sociedad por sexos" porque "victimizan a las mujeres" y "criminalizan a los hombres".
En un sentido similar se expresó el partido ultraderechista Vox, que denuncia la supuesta existencia de un feminismo "supremacista" que busca "adoctrinar en la desigualdad".
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Aunque están convocados distintos actos a lo largo de todo el día, está previsto que la principal movilización con motivo de este 8-M sean las manifestaciones convocadas por la tarde en el centro de las principales ciudades del país.