Más temprano este 12 de marzo, la Policía Civil de Río de Janeiro detuvo al presunto asesino de la concejala, el policía militar jubilado Ronnie Lessa, y al expolicía militar Élcio Vieira de Queiroz, que conducía el vehículo desde el que se realizaron los disparos, el 14 de marzo de 2018.
"Ahora más que nunca, Amnistía Internacional reitera la necesidad de un grupo externo e independiente de especialistas para seguir las investigaciones y el proceso, como ya se hizo en otros países", informó la organización en un comunicado.
"Las investigaciones deben continuar hasta que los autores y los mandantes del asesinato sean llevados ante la Justicia", finaliza el comunicado.
Desde marzo del año pasado, cuando Franco fue asesinada junto a Anderon Gomes, el conductor del vehículo en que viajaba, Amnistía Internacional Brasil lidera los movimientos de presión para que a las autoridades aclaren quién ejecutó el asesinato y quién ordenó la muerte.
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Franco estaba afiliada al izquierdista Partido Socialismo y Libertad, y era una destacada defensora de los derechos humanos, con un papel destacado en favor de la población negra, el colectivo LGTB y vecinos de favelas y periferias.