"El buque quedó bien conservado, pero estoy seguro de que su popa, donde impactó el torpedo, está destruida", declaró uno de los arqueólogos, Peter Harvey.
Según opinó, el hallazgo permitirá aclarar la situación para los familiares de los marineros perecidos.
Los fragmentos del buque SS Iron Crown, especializado en el transporte de minerales, yacen en el fondo del mar a unos 100 kilómetros frente a las costas del estado de Victoria, en el sur de Australia.
El barco se fue a pique en junio de 1942, después de que lo alcanzara un torpedo en el estrecho de Bass, que separa la isla de Tasmania de la costa meridional de Australia.
Los arqueólogos submarinistas hallaron los fragmentos del Iron Crown con la ayuda de equipos hidroacústicos y una cámara especial que filmaba bajo el agua.
La televisión ABC comunicó que el Gobierno de Australia ha sido informado del hallazgo.
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