En las imágenes publicadas por Xinhua se puede ver a un oso panda adulto que rasca su trasero contra un trozo de árbol.
Los comentarios del centro para este vídeo explican que este comportamiento es de gran placer para este animalito.
Es curioso, como lo muestra el zoológico de la ciudad rusa de Omsk, el rascarse no es un comportamiento natural, sino que necesita ser mostrado a los pequeños por sus padres para que aprendan. En el siguiente vídeo una una hembra de jabalí le da una clase a sus lechones.