"Yo quisiera advertir que al fin de cuentas sufrirá mucho daño la propia economía japonesa", dijo citado por la agencia de noticias surcoreana Yonhap.
Japón anunció el 1 de julio que limitará las exportaciones a Corea del Sur de tres componentes químicos necesarios para la fabricación de los semiconductores y equipos electrónicos.
Se trata, en particular, de las poliamidas fluoradas (a Japón le corresponde el 90% de su producción mundial), necesarias para fabricar pantallas flexibles y resistores de semiconductores.
Se estima que Japón produce un 70% de todos los resistores.
Las restricciones empezaron a regir oficialmente desde el 4 de julio.
Tokio también planea eliminar a Japón de la lista de los llamados países "blancos", los que no necesitan pedir cada vez autorización para adquirir productos de altas tecnologías o las propias tecnologías.
Japón indicó como causa de eso la "pérdida de la confianza" entre ambos países tras la demanda de los organismos judiciales de Corea del Sur de pagar las compensaciones a los coreanos por su trabajo forzoso entre 1910 y 1945, durante el colonialismo nipón.