Se trata de una movilización generalizada y que ha ido creciendo, dicen los manifestantes. Protestan contra las políticas del Gobierno encaminadas a llegar a un acuerdo de 4.200 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional.
Se espera que el 17 de julio los taxistas se unan a una huelga general, que durará hasta el fin de semana.