Emily Koford, de 20 años, y su madre Erin estaban visitando el Gran Cañón de Arizona y decidieron tomar una foto del emblemático lugar, según informa el canal StoryTrender de YouTube.
Emily dio varios pasos hacia atrás sin mirar lo que tenía a sus espaldas para sacar una foto mejor, pero se resbaló con el pie derecho y casi se cae cañón abajo. Por suerte, la joven logró recuperar el equilibrio, pero tanto ella como su madre se llevaron un buen susto.
Un testigo del incidente, Kevin Fox, logró grabar el impactante momento en un vídeo mientras filmaba el paisaje.